Hoy hace un "dia de perros" en toda nuestra geografía nacional. Quizás, sea el momento oportuno para deleitarse con la música o la lectura. Si os decidís por esta última aquí os dejo el relato publicado en el Bloguecedario el sábado 12 de Diciembre. La frase propuesta era: En ocasiones veo.....
Por José Manuel Beltrán
Instantes antes gritó: ¡Me has arruinado la vida!. Le observé y, al final, se lanzó al vacío. En todo el remolino de gente, dos mujeres se afanaban con gran sutileza en apropiarse de las carteras de algunos de los allí reunidos. Unos niños, ajenos a la escena, jugueteaban ante la despistada mirada de sus madres. El mayor imponía su fuerza física ante los otros para conseguir ser él quien ganase el juego, por supuesto, alejado de todo tipo de reglas.
El barrendero y otro ayudante -el cual no era necesario- deslizaba su cepillo por la calle, a lo sumo en tres ocasiones seguidas, para inmediatamente interrumpir su tarea y fumarse un nuevo cigarrillo. El ayudante le reía las gracias. A simple vista parecían una pareja bien avenida pero, según iba subiendo el tono de la discusión, los gestos de él denotaban un acusado machismo.
Pasó muy cerca de mí. Seguía vistiendo con la sotana tradicional pero ese disfraz se volatilizó cuando un mendigo le solicitó una pequeña limosna. En el metro, unos jóvenes increpaban y manoseaban a una asustada chica aparentemente de origen africano. Nadie se preocupaba por ella. Al cambiar de vagón, todos los asientos estaban ocupados. Dos ancianos se esforzaban, como podían, en no perder el equilibrio una vez puesto el tren en marcha. Los asientos continuaron ocupados por las mismas personas, todas ellas de menor edad.
Estaba a punto de atravesar el paso de cebra junto a otros muchos transeúntes que aguardaban el cambio del semáforo. Allí mismo se quejó de un fuerte dolor en el pecho, cayendo al suelo. Rogó, por favor, que de uno de sus bolsillos sacaran unas pastillas para colocárselas debajo de la lengua. El semáforo cambió y todos los transeúntes siguieron su camino. La cola, para la demanda del puesto de trabajo, era larga. Le pidieron el curriculum y dijo no tener ninguno. Solo portaba una excelente carta de recomendación del director de la prisión. La respuesta fue inmediata. Su carta no fue admitida y el puesto de trabajo quedó para otro.
Ahora, ya no puedo contar más. Son muchas más las observaciones de situaciones tan o más desagradables como las relatadas. Nos llaman a la consulta con excesivo retraso sobre la hora prefijada. Es extraño pues es una clínica privada. La enfermera, descuidadamente, no ha terminado de abrocharse todos los botones que resguardan su apreciada pechera. Su pelo también está alborotado. El doctor está mostrando las pruebas y yo le escucho claro y atento. Sin poder llegar al final mi madre se pone a llorar. -No te preocupes, mamá. Yo ya he visto lo suficiente-.
-Señora, su hijo nacerá ciego. Lo siento mucho.
Pues un relato como el dia,de perros rabiosos, cuanta violencia, egoismo, pasotismo que refleja de alguna manera lo que nos rodea. Para reflexionar José, por que leyendo esto he sentido que todas las puertas se iban cerrando, y da miedo vivir en un mundo asi. Aunque se que alguna hay abierta por ahi, y entre ellas la de tu estupendo blog. Un beso y gracias por hacernos meditar.
ResponderEliminarNos dejas un buen mensaje para Navidad opino lo mismo que Cele vivimos en mundo que da miedo y lo peor es que cada vez va a mas nadie se mete en la piel de nadie y si eres buena aun te toman por tonta.
ResponderEliminarUn abrazo!!
FELIZ NAVIDAD
Como siempre genial, Jose...
ResponderEliminarY es cierto, hace un día para quedarse en casita...
Muchos besitos, te deseo unas felices fiestas para ti y para Nuria.
Es cierto José Manuel. Todos hemos podido observar situaciones que nos parecen injustas, situaciones que sólo requerirían de un poco de humanidad para transformarlas, pero la humanidad se olvida de ser humana y olvida esa capacidad única de superar el instinto del egoísmo y tantos otros instintos que nos hace similares a los animales, y en nada diferentes si nos dejamos llevar. Pero también hemos observado a jóvenes levantarse de su asiento y ofrecérselo al anciano que intenta sujetar su cuerpo a una barra de bus o de metro. Personas que dan oportunidades a los desfavorecidos (ya sé los menos, pero haberlas, haylas?), gente buena, gente comprometida, gente sensible...como tú por ejemplo. Y una buena noticia es que un médico alemán ha conseguido implantar un microchip en la retina que manda impulsos al cerebro y ha conseguido devolver la visión a personas completamente ciegas. Ya veremos su alcance. Pero yo soy de las que prefiere dejarse engañar mil veces por la humanidad, antes que perder mi fe en ella.
ResponderEliminarUn abrazo grande grande.
NANANANANANA, DE ESO NADA. Que aquí tenemos 22 grados, joven, ajjajajaja.
ResponderEliminarEres la leche escribiendo relatos, ciudadano.
ResponderEliminarSiempre me quedo ahí, con la intriguilla hasta el final.
Y luego, "pom!", en toda la frente.
Me encanta.
Muchos besos, José Manuel.
Y feliz navidad!!
Comentario general:
ResponderEliminarLas colaboraciones en el Bloguecedario se realizan en función de una frase propuesta. Cada uno es libre de interpretar, en su texto, la frase sugerida como crea conveniente.
Intento, en cada uno de los escritos, hacer reflexión sobre algún tema concreto sobre lo por mí inventado. A veces es triste, o real. En ocasiones alegre o también real. Otras, lo son bajo utopías que quizás puedan ser reales. Lo de la intriga hasta el final, no sé, es mi forma de escribir.
Hola Cele,
Siempre este blog estará abierto para tí y para todo el que quiera entrar por esta ventana. Porque trato de abrir las puertas de la vida que, a mi parecer, se encuentran cerradas. Un beso, ciudadana. Muchas gracias.
Hola Estela,
Dice el refrán que "de bueno a tonto solo hay un paso". ¿Sabes? Ójala hubiese muchos tontos en el mundo pues antes habrían sido buenas personas. Lo que no admito es la mala fe en los actos. Un beso, ciudadana. Muchas gracias.
Hola Ana,
Muchas gracias por tus palabras. Feliz Navidad también para tí y para los tuyos. Un beso, ciudadana.
Hola media luna:
Siempre, ahora también, mantengo una defensa en favor de la juventud. Tendrán muchos defectos (ni me acuerdo de los que teníamos nosotros, que también eran muchos) pero existen personas maravillosas aunque, lamentablemente, no parezcan -por sus hechos- la mayoría.
Sabía de la noticia del doctor alemán. Extraordinario.
Un besazo para tí, prima, y Feliz Navidad.
Hola Menda,
Mi afortunada Menda se está bañando en la playa mientras los del Norte aprenden a esquiar en plena calle. Jajaja. ¡Mira que en represalia, te mando otro meme ehhh! jajaja
Un besazo ciudadana y Feliz Navidad.
Hola Lourdes,
¿Te acuerdas, diablillo, con los primeros relatos que escribía? Jajaja, ya me has cogido el puntillo ehhh y eso que trato de ponértelo difícil
Un besazo ciudadana. Feliz Navidad.
Feliz Navidad para todos, ciudadanos.
Hola, ciudadano, hermosa y triste entrada, desgraciadamente, las cosas que describes en tu entrada pasan.
ResponderEliminarA mí precisamente me pasó ayer, yendo por la calle Calvario, que había un matrimonio, con su hija, ya adolescente, con un gran ataque, dando gritos en el suelo, y dando cabezasos; la gente se pasaba a la otra acera, para no tropezarse con esa escena, a mí me dió pena, y pregunte a los padres si querían que llamara a un médico, ellos me dijeron que no, que eran habituales esos ataques, y la alzaron del suelo, con mucha dificultad, por la fuerza de la hija, pero no me dejaron ayudarles, no sé porque.
Esto que te cuento es una realidad, pura y dura.
Triste, pero cierto, parece que la gente no quiere ayudar, por no complicarse la vida.
Después de estas palabras, poco puedo decirte, pero sí te diré QUE PASES UNA FELIZ NAVIDAD, CIUDADANO.
Hola amigo José Manuel Beltrán, por desgracias lo escrito en tu relato es una historia, como la vida misma, estas cosas pasan también por desgracia la vida real , suerte que esto es imaginación escrita . Aquí en Granada el tiempo esta con frío y muy lluvioso , Un abrazo de MA .
ResponderEliminarFELIZ NAVIDAD VECINO .
Hola, Jose, tu relato, genial.
ResponderEliminarAprovecho la ocasión para desearte que tengas felices fiestas.
ps. Tu postal me encantó, gracias por compartirla.
Un rampyabrazo.
José: primero. gracias por tu visita a mi blog personal. Y no considero una entromisión tu comentario, al contrario: es acertado, teniendo en cuenta que los argentinos tenemos elecciones cada 2 años y podemos habilitar los cambios... Pero éstos llegan muy lentamente o pese a decidir que sucedan, no llegan nunca. Mi país está en manos de unos pocos insociables y nosotros, el pueblo, miramos con indiferencia todo lo que nos pasa, porque le pasa a los otros. Reaccionamos sólo cuando nos toca de cerca. El problema es que cada vez nos toca más cerca y seguimos igual.
ResponderEliminarEn relación al relato: me gustó y refleja un poco el espíritu de todo mi comentario. Ya no somos la sociedad humana, sino entes individuales e indiferentes.
Saludos y Felíz Navidad con los tuyos y con el Señor como invitado especial a tu casa.
Simplemente genial. que tengas una Feliz Navidad! Por cierto, te he dejado un regalito de Navidad en mi blog. cuando quieras puedes pasar a recogerlo :-)
ResponderEliminarHe venido a dejarte mi felicitación de Navidad, con mucho cariño, que la Paz reine en tu hogar, y que el año próximo sea maravilloso.
ResponderEliminarUn beso.
Maru
Hola ciudadano. Paso por aqui para desearte una MUY FELIZ NAVIDAD!!!
ResponderEliminarBesos miles para ti y para Nuria. Que paséis unos días estupendos.
Genial el relato ciudadano...muy acorde con un día como el descrito.jajaja
ResponderEliminarEs agobiante dentro de su genialidad...
Pero menos mal, que tambien hay coas lindas que observar..en un día de sol y sonrisas
Un besote
Gizz
Buenos mensajes para rflesionar en estos dias. Un beso y felices fiestas
ResponderEliminar